FALTA DE LEGITIMIDAD INSTITUCIONAL Y CORRUPCIÓN AGRAVAN CRISIS POLÍTICA DEL PERÚ – RCR Peru
RCR, 28 de diciembre de 2024.- El abogado y especialista en Gestión Pública, Ricardo Vásquez, y el politólogo y consultor internacional, Manuel Bernales, analizaron los problemas estructurales que enfrenta el país, los cuales han contribuido al deterioro de las instituciones gubernamentales.
Bernales destacó la existencia de un problema cultural que afecta no solo la conducta política, sino también la economía y las dinámicas sociales.
“Entonces hay un problema cultural que incluye la conducta económica, la conducta en la familia, en la comunidad y la conducta política. Y me parece que el problema peruano es el agravamiento de antivalores en la cultura económica, social y política”, dijo Manuel Bernales en el programa Perú 2030 de RCR.
Por su parte, Ricardo Vásquez subrayó que la descomposición social es una consecuencia directa de la corrupción.
“Al hablar de descomposición, estoy diciendo que todo aquello que era una base referencial para el funcionamiento de la sociedad y del Estado, está desintegrándose hace mucho tiempo y por efecto de la acción de corrupción, que no es otra cosa que la acción de intereses que no se pueden hacer públicos, de aprovechamiento del Estado”, explicó.
Ambos coincidieron en que la crisis de los partidos políticos es un aspecto crucial que agrava la falta de legitimidad de las instituciones y que tiene su origen en la sociedad.
“No hay que concentrarse solo en los partidos. El problema es que la fuente de los partidos es la sociedad. Si la sociedad genera esas tendencias, en los partidos se van a expresar estas tendencias, pero también en las instituciones, en los grupos de interés, sean grupos de presión o grupos de poder”, resaltó Bernales.
Vásquez sostuvo que, para abordar la crisis en el sistema de partidos y el sistema electoral, es esencial realizar un escrutinio profundo de las instituciones y fomentar el compromiso colectivo de la ciudadanía.
“Estamos hablando de un sistema electoral organizado para ganar, de cómo puede eliminarse candidatos y cómo puedo ganar. Por eso es que se habla, por ejemplo, de una ley para que los sentenciados por delitos graves sean separados de cualquier posibilidad de competir electoralmente diez años después de su condena”, agregó.
