AMLO defiende al golpista Castillo y llama “presidenta espuria” a Dina Boluarte

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), reveló que en la reunión que tuvo con Lilia Paredes, ella le pidió que continúen apoyando al golpista Pedro Castillo.

“La recibí. es una mujer excepcional, humilde, buena, que vino a agradecerme lo que se hizo con ellos, a platicarme de sus hijos que ya están estudiando”, dijo en su conferencia de prensa de este viernes.

“Está llena de sentimientos y también pidiéndonos que no abandonemos a su esposo. Nosotros consideramos que fue una gran injusticia el haberlo destituido de su cargo porque él fue electo por el pueblo”, agregó López Obrador.

En la conferencia de prensa matutina desde el Palacio Nacional, López Obrador llamó “presidenta espuria” a Dina Boluarte, “ el 85% la desaprueba (…), y aun así ellos mandan con las ballonetas y la represión y la fuerza”, señaló. Además, cuestionó la labor de la OEA por la crisis que se vive en el Perú.

Además, el mandatario mexicano no dudó en cuestionar la labor de la OEA sobre la situación en el Perú y aseguró que el organismo le da la razón al autoritarismo.

“Desgraciadamente, la OEA y sus organismos de derechos humanos están al servicio de los potentados. Es para que estuviese la OEA convocando a todos los estados miembros para pedir que se libere al presidente ilegal e injustamente preso y que se le restituya en su cargo porque fue electo democráticamente. En cambio, o se hacen de la vista gorda o le dan la razón al autoritarismo y la respuesta es la fabricación de más delitos, el control casi absoluto de los medios de información en el Perú, el olvido de la gran prensa internacional”, sostuvo.

AMLO reiteró que seguirá apoyando a la esposa de Castillo Terrones. “Nosotros vamos a seguir apoyando a la señora del presidente Pedro Castillo. A eso vino. La abracé y expresé mi solidaridad con el pueblo del Perú, con el pueblo humilde, pobre, indígena humillado”.

Como se sabe, Andrés Manuel López Obrador recibió a Lilia Paredes en el Palacio Nacional, sede del gobierno de México, la noche del jueves 23 de febrero.